- Utilizá envases durables de material plástico, tapa hermética y de fácil limpieza, aptos para alimentos (tápers). Si se va a calentar en un microondas, asegurate que el recipiente sea el indicado. En caso de que necesites envolver comidas, usá bolsas plásticas aptas para alimentos, film o papel aluminio.
- Asegurate de que la lonchera, los refrigerantes, los utensilios y los tapers estén limpios
- Las preparaciones deben ser frescas. Procurá preparar la ración la noche anterior y guardarla en la heladera hasta el momento de armar la lonchera, para que esté bien fría.
- Adaptá el tamaño del táper al del volumen de la comida para evitar dejar espacios de aire.
- Cuidá que estén bien cerrados los tápers para que no se vuelque la comida, y la lonchera, para evitar la pérdida de frío.
- Retirá de la heladera la comida justo antes de salir para la escuela.
- Colocá los refrigerantes en el freezer con anticipación para que se encuentren congelados en el momento de su uso.
- Enviá alimentos listos para consumir, pelados y sin carozos, semillas ni espinas
- Identificá cada táper.
- Al volve a casa limpiá la lonchera y todos los elementos utilizados y descartá los restos de alimentos.
Tené en cuenta:
Sí necesitan frío (y deben llevarse en las loncheras): ensaladas de fruta, frutas frescas lavadas, cortadas y peladas; postres, yogures, pizzas, empanadas, arroz, fideos, sándwiches, huevos duros, salchichas, bocaditos de pollo empanados, buñuelos, guisos, aderezos.
No necesitan frío (pueden llevarse tanto en la mochila con me la lonchera): Pan, barra de cereal, madalenas, frutas secas, semillas, frutas frescas lavadas sin pelar ni cortar.
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